Me decidí a llamar a Agustín Carstens y hacerlo entrar en razón. Pero me topé con puras negativas.

Chale, pero entendí que está muy ocupado así que insití más tarde, pero...

Y fué entonces que empecé a dudar, y sentí que se me estaba negando, pero le volví a llamar y otra de sus asistentes me contestó y me dijo...

Y pues luego de 3 intentos fallidos pensé que se me estaba negando, así que me fui a plantar afuera de su oficina para ver si así me pelaba pero sólo lo vi salir con sus asistentes y me dijo mientras se iba:

Es por eso que llegué a varias conclusiones.
1. hay demasiada gente en las nóminas del gobierno viviendo de nuestros impuestos sin hacer nada.
2. El gobierno no escucha a los contibuyentes y se niegan a hacerlo, quieren que paguemos todo nosotros y ellos no aflojan nada.
3. Agustín Carstens se parece mucho a Jabba el Hutt.
Chale.